La estrategia anual de ProHuerta realiza ajustes a nivel territorial en función de la experiencia y las directivas programáticas. En 2017 se incorporaron tecnologías de la información, en un plan que incluyó el registro online de la información de entrega de semillas, el monitoreo in situ de un área identificada como vulnerable y otro colaborativo a partir del envío de información de los propios huerteros vía WhatsApp.