Little is known about effective ways to operationalize agricultural innovation processes. The authors of this article use the MasAgro program in Mexico (which aims to increase maize and wheat productivity, profitability and sustainability), and the experiences of middle level ‘hub managers’, to understand how innovation processes occur in heterogeneous and changing contexts. Their research shows how a program, that initially had a relatively narrow technology focus, evolved towards an innovation system approach.
La extensión es el proceso de intervención de carácter educativo y transformador, cuyo objetivo es el desarrollo económico y social de las familias rurales, a través de servicios de asistencia técnica, intercambio de tecnología, desarrollo de capacidades y capacitación. Este documento muestra como lograr estos servicios.
La innovación, producción y comercialización de un producto resultan de la interacción de una diversidad de actores. Así, el modelo de extensión hub del programa gubernamental MasAgro busca ser un espacio en el que agricultores, extensionistas, proveedores de insumos, instituciones gubernamentales y de enseñanza e investigación, entre otros, interactúen, con el fin de promover bienestar individual y colectivo a través de la innovación.
Los cambios acontecidos en la agricultura cubana a finales del siglo XX provocaron la ruptura del paradigma basado en la dependencia de importaciones, por lo que se precisó comenzar a construir un nuevo modelo técnico-económico sobre la base del desarrollo endógeno, asociado al fomento de capacidades innovadoras y de tecnologías sostenibles; ello exigió que los centros de desarrollo de conocimiento se centraran en la aplicación de innovaciones, mediante adecuados procesos de extensión rural.
Para revertir la situación de inseguridad alimentaria, el sector agropecuario cubano requiere de inversiones en infraestructuras y de cambios en la gestión e innovaciones que se adapten a las condiciones económicas, ecológicas, sociales y culturales de cada territorio. Ello implica una mejora de las condiciones en los ecosistemas a partir de la generación colectiva de alternativas con base en el intercambio, el apoyo en las alianzas y las experiencias entre los diferentes actores.
El análisis de redes sociales aplicado al estudio de los sistemas productivos locales (redes de innovación) contribuye a vislumbrar la complejidad de los procesos de innovación tecnológica y su transferencia en el sector rural, mediante la caracterización de los vínculos que establecen los diversos actores sociales participantes, y que con el tiempo pudieran constituir ambientes regionales de innovación.
El objetivo de este trabajo es dar a conocer cómo se han desarrollado los vínculos entre el sector productivo y la Estación Experimental de Pastos y Forrajes “Indio Hatuey”. Se emprendieron una serie de medidas para la recuperación de la base alimentaria del ganado, con el empleo de prácticas alternativas y la aplicación de sistemas sostenibles de producción animal, las cuales tenían como principal objetivo el aumento de la producción, aun con pocos recursos
El servicio de extensión agrícola es uno de los principales vínculos entre la producción y el uso del conocimiento para la agricultura de los países en desarrollo. En la literatura, se han identificado agentes que actúan como intermediarios para vincular a dos o más actores que no se encuentran conectados. Sin embargo, pocos estudios abordan los mecanismos que éstos utilizan para intervenir y menos aún, una tipología que los caracterice e integre.
La presente propuesta de investigación pretende como objetivo generar un modelo metodológico operativo para lograr la competitividad de los pequeños agricultores en condición de pobreza y marginación.
El objetivo de este estudio realizado en el año 2015 fue analizar el nivel de competitividad de 145 unidades familiares distribuidas en los tres estados. Se empleó un cuestionario para la obtención de datos que facilitaron la detección de los factores que han intervenido para tal situación. Se seleccionaron comunidades representativas de los tres estados (Oaxaca, Guerrero y Chiapas) y se recopiló información socioeconómica por medio de cuestionarios como la principal fuente de datos, la cual se complementó con talleres y pláticas informales.