En este informe se describen las experiencias y enfoques de la constitución de cadenas agroalimentarias y se plantea la necesidad de desarrollar una nueva institucionalidad y formas de cooperación técnica para el fortalecimiento del sector agrícola y rural. Se espera que las cadenas agroalimentarias se constituyan en mecanismos de diálogo e instrumentos de gestión para la competitividad y la toma de decisiones según las demandas de los Estados Miembros del IICA.
El documento “Esquemas de comercialización que facilitan la vinculación de productores agrícolas con los mercados” define tres esquemas de comercialización que les permiten a los productores y a sus organizaciones entender las demandas de los consumidores, con miras a desarrollar procesos de valor agregado que les devenguen mayores ganancias.
En Colombia la política pública de cadenas productivas del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural (MADR) se ha consolidado como una estrategia de desarrollo para el agro. Los Comités Regionales (CR) planean e implementan buena parte de las iniciativas de apoyo público en conjunto con el sector productivo-privado local.
Las políticas de desarrollo rural han evolucionado considerablemente en América Latina. Durante los últimos 15 años, una de las principales áreas de énfasis ha sido el desarrollo de iniciativas que promuevan la formación de cadenas productivas en el sector agrícola en torno a unos productos estratégicos, los cuales generan economías rurales mucho más competitivas. En Colombia, el enfoque es novedoso, ya que se centra en el establecimiento de organizaciones de cadenas en el ámbito nacional y regional.
En Colombia, el desarrollo rural requiere de una institucionalidad que contribuya a cerrar la brecha urbano-rural, que cuente con los instrumentos de política necesarios para la inclusión productiva y la promoción de una asociatividad orientada a una ruralidad competitiva. Los 12 años de experiencia de la implementación del Proyecto de Apoyo para las Alianzas Productivas (PAAP) del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural (MADR) aportan lecciones en esta dirección.
Con este documento, el MAGAP y el IICA buscan difundir una metodología que permite fortalecer las capacidades de comercialización de pequeños productores, comparar las lecciones aprendidas de su implementación y apoyar así el esfuerzo de instituciones públicas, gobiernos autónomos descentralizados y entidades que persiguen el desarrollo de sus territorios.
Se presenta en este documento la metodología de Escuela – Empresa desarrollada por el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural de Colombia – Programa Oportunidades Rurales- y el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) en 2010, como respuesta a los desafíos de fortalecimiento en capacidades de microempresarios rurales en Colombia, con una perspectiva de aplicación circunscrita inicialmente a los temas de comercialización, pero con una proyección de aplicación más allá de esta temática.