Farmers’ experiments can be defined as the autonomous activities of farmers to try or introduce something new at the farm, and include evaluation of success or failure with farmers’ own methods. Experiments enable farmers to adapt their farms to changing circumstances, build up local knowledge, and have resulted in countless agricultural innovations. Most research on the topic has been conducted in countries of the south.
The creative process that leads to farmers’ innovations is rarely studied or described precisely in agricultural sciences. For academic scientists, obvious limitations of farmers’ experiments are e.g. precision, reliability, robustness, accuracy, validity or the correct analysis of cause and effect. Nevertheless, we propose that ‘farmers’ experiments’ underpin innovations that keep organic farming locally tuned for sustainability and adaptable to changing economic, social and ecological conditions.
This is the proceedings of the international conference ‘Innovations in Organic Food System for Sustainable Production and Enhanced Ecosystem Services’. The proceedings are a compilation of peer-reviewed articles based on presentations of 18 speakers invited conference speakers and published as a Special Issue of the scientific journal ‘Sustainable Agriculture Research’ by the Canadian Centre of Science and Education.
Organic farming is recognized as one source for innovation helping agriculture to develop sustainably. However, the understanding of innovation in agriculture is characterized by technical optimism, relying mainly on new inputs and technologies originating from research. The paper uses the alternative framework of innovation systems describing innovation as the outcome of stakeholder interaction and examples from the SOLID (Sustainable Organic Low-Input Dairying) project to discuss the role of farmers, researchers and knowledge exchange for innovation.
El objetivo de este trabajo es mostrar, a través de un estudio de caso, la utilidad de incorporar en la práctica de los proyectos la definición y evaluación participativa de las metas, para conocer las percepciones de la diversidad de actores que conforman los espacios locales, identificar posibles alianzas y armonizar intereses y resultados esperados en las estrategias de desarrollo con enfoque de género
En este artículo se presenta y discute la información fruto de los talleres realizados durante el 2007 y 2008 en los Centros Locales de Innovación Agropecuaria (CLIA), con la participación de productores y otros actores locales en nueve provincias del occidente, centro y oriente cubano. Se muestra el caso del CLIA Las Tunas.
Este trabajo propició que a fines de 2006, productoras y productores demandaran un lugar para mostrar las producciones logradas. Para ello, el objetivo fue crear espacios para que los productores y productoras intercambiaran, aprendieran y comercializaran sus productos en la comunidad los que se denominaron Festivales de Innovación Local o Expoferias
En este artículo se presenta el significado de las Ferias de Agrodiversidad ejecutadas, el impacto y repercusión de las mismas dentro de la innovación agropecuaria. Se realizó un seguimiento, como casos de estudio, de los campesinos participantes en la primera feria de frijol procedente de La Palma, así como de dos Cooperativas de Producción Agropecuaria de San Antonio de los Baños, solicitándoles anualmente una declaración de la diversidad existente y del rendimiento obtenido en el cultivo de frijol en sus unidades productivas.
El Programa de Innovación Agropecuaria Local (PIAL) posee una amplia diseminación de acciones en cientos de fincas, buscando alternativas locales que le den solución a las necesidades de prácticas sostenibles con carácter agroecológico, para ello se hace necesario demostrar la efectividad económica del desarrollo a nivel de finca. Este artículo desarrolo un análisis de costo-beneficio que es una herramienta de toma de decisiones para desarrollar sistemáticamente información útil acerca de los efectos deseables e indispensables.
Los objetivos del presente trabajo fueron: implementar actividades participativas con enfoque de género, que permitieran el desarrollo de la mujer dentro de los contextos agrícolas en estudio; generar capacidades y utilizar habilidades ya existentes en estas, que permitieran su incorporación a las labores productivas y con ello a la obtención de nuevas fuentes de ingresos familiares y el mejoramiento de la alimentación, así como potenciar de manera general, una mayor participación e impacto femenino en el funcionamiento de la comunidad.