Los cambios acontecidos en la agricultura cubana a finales del siglo XX provocaron la ruptura del paradigma basado en la dependencia de importaciones, por lo que se precisó comenzar a construir un nuevo modelo técnico-económico sobre la base del desarrollo endógeno, asociado al fomento de capacidades innovadoras y de tecnologías sostenibles; ello exigió que los centros de desarrollo de conocimiento se centraran en la aplicación de innovaciones, mediante adecuados procesos de extensión rural.
El diagnóstico participativo de comunicación cuyos resultados se presentan en este informe, se realizó en el mes de marzo 2017 en el departamento de San Marcos y permitió investigar las percepciones, necesidades y prácticas comunicacionales de la población joven rural, un segmento raramente considerado en los estudios de sector.
Con el objetivo de generar insumos para las iniciativas TIC de las instituciones públicas para la agricultura y rescatar las experiencias y lecciones aprendidas de los países de America Latina y el Caribe que llevan la vanguardia en este tema, a mediados de 2010 el Centro de Análisis para la Agricultura (CAESPA) del IICA inició un proceso de identificación y análisis de los principales factores que retrasan o limitan el impacto de las TIC en esas instituciones.
En los últimos años, han surgido nuevas oportunidades que permiten que las organizaciones de investigación adopten prácticas innovadoras que fomentan la gestión y el intercambio del conocimiento, tanto a nivel interno como entre sus respectivas redes.
La participación de los pequeños productores en procesos de investigación asociados a los sistemas productivos agrícolas ha sido difícil de lograr. Por esto el objeto de la presente investigación fue el de lograr la vinculación de pequeños productores de yuca (Manihot esculenta Crantz) a procesos de investigación en la región caribe de Colombia. Por lo anterior, se implementaron ensayos de campo en los que se empleó un método de investigación participativa a través de modelos integrados de producción.
Esta herramienta permitirá a los actores de los movimientos de agricultura orgánica de los países diagnosticar el estado de sus sistemas nacionales de control de la producción orgánica (SNC) y elaborar, de manera participativay con el apoyo del IICA, planes de acción que fortalezcan las instituciones e instancias asociadas al control de la producción orgánica en el ámbito nacional, brindando así una mayor garantía de la calidad de este tipo de productos a los consumidores de los mercados nacionales e internacionales.
El informe está estructurado en tres partes:
• la primera parte trata de la adaptación de la agricultura familiar a los cambios climáticos y de las condiciones de la adaptación; • la segunda parte aborda el lugar que ocupa la adaptación de la agricultura familiar en las políticas públicas;
• la tercera parte propone algunas recomendaciones para una mejor integración de este tema en las políticas públicas.
Una presentación de los tres estudios de caso-países figura también en anexo.
Con el espíritu de contribuir a este enfoque se presenta esta guía metodológica sobre “Sistemas Territoriales de Abastecimiento Alimentario” orientada a técnicos, académicos y tomadores de decisiones tanto de gobiernos locales, regionales o nacionales como de la iniciativa privada. Su objetivo es brindar pautas para analizar los sistemas de abastecimiento, con énfasis en la inclusión de la agricultura familiar.
Los Antecedentes Conceptuales proporcionan un análisis detallado de los fundamentos conceptuales y principios del Marco Común de la TAP.
El objetivo del Marco Común de la TAP es promover una mayor coherencia y un mayor impacto del desarrollo de capacidades en apoyo a la innovación agrícola en los trópicos. El Marco Común fue desarrollado en el 2015 a través de un proceso altamente participativo, en el cual se acordó que el Marco debería proporcionar las bases conceptuales y una guía operativa.
Rendir un informe anual del trabajo realizado por el IICA es más que un compromiso con la transparencia y la rendición de cuentas; constituye también un medio para reconocer los avances de nuestros Estados Miembros en beneficio de sus pueblos. Los logros que ellos alcanzan gracias a los aportes que les brinda el Instituto los hace mantener su confianza en una organización que de hecho les pertenece.